Hotel Roc Blanc

Es un hotel muy acogedor y familiar. Hemos estado muy a gusto. Tal vez se tendrían que renovar un poco las instalaciones.

És un hotel familiar antiguo pero agradable, lo unico que tendrían, según mi opinión, que adecuar un poco las habitaciones aunque sea pintandolas, poniendo televisor que funcione, y la calefacción un poco más alta, teniendo en cuenta que es un lugar donde hace frío, una estación de esqui, la primera noche no pudimos dormir, estaba helado.

Buena relación calidad precio, excelente ubicación: proximidad a las pistas. El hotel debería renovarse, ha quedado un tanto anticuado.

Hotel correcto para la relación calidadprecio.

Hotel rustico, antiguo pero cuidado dentro de lo normal. Situado en un paraje precioso, noches de estrelladas y de silencio absoluto.

Hemos repetido y repetiremos sin duda.

Hotel agradable, rústico. Buena relación calidad precio y desyunos muy completos, perfecto para los deportistas.

Buena relación calidad precio. La gente del hotel muy amable.

Buena situación, con un paisaje muy de montaña, personal muy amable y atento, desayuno abundante y bueno y habitaciones limpias. Posiblemente volveremos.

Nuestra estancia en el hotel ha sido muy corta pero hemos quedado muy satisfechos por las instalaciones, a pesar de que es un poco antiguo, la limpieza, el personal y el buffet. Recomendaria este hotel a mis amigos y familiares en caso de necesitar alojamiento en esa zona.

Es la segunda vez que vamos a este hotel y la verdad es que tiene una relación calidad precio excepcional.

Entorno del hotel muy bien cuidado y bonito. Las habitaciones no tanto, un poco antiguas y les haría falta una renovación, pero limpias. El personal del hotel muy agradable y atento.

El hotel está en una zona muy bonita y tranquila en verano, en mitad de los pirienos, el hotel tiene muy buena atención por parte de sus empleados y es muy limpio, aunque un poco antiguo. Los desayunos son regulares pero en general está muy bien. En resumen lo recomiendo.

Genial, muy buena relacion calidad-precio y buena ubicacion.

Muy confortable, limpio y tranquilo.

Mejorar el café y zumo del desayuno.

El hotel tiene un encanto especial, su ubicación cerca de la estación de ski de La Molina, sus vistas, sus paisajes nevados y la calidez de sus ambientes. El personal es amable y siempre dispuesto a resolver tus dudas. La calefacción y el agua caliente, fundamental en esta época del año, funcionan de maravilla. El desayuno es correcto aunque se hecha en falta un buen café ( la máquina prepara unos brebajes que no se pueden beber). Las habitaciones están bien aunque necesitan un lavado de cara, pero están muy limpias y son comfortables. En definitiva, probablemente repita el próximo año.