Ya es la tercera vez que vamos a estos apartamentos y hemos quedado más decepcionados que otras veces, sobre todo, por los enseres que habían en la casa. En la cocina no había casi de nada: ni tostadora, ni batidora, todas las sartenes viejisimas, casi sin cubertería ni vajilla ni cristalería, en fin, todo muy, muy escaso. Creemos que los dos apartamentos estandares que nos tocaron, casi no se usan y de ahí su abandono en este aspecto. Por todo lo demás, muy bien, como siempre.
Estancia en el hotel: Abril 2012