La ubicación es perfecta está a cinco minutos de la Catedral y cerca de muchisimos bares... es una pega porque por la noche se escucha todo...la insonorización no es buena, el sábado me lleve toda la noche escuchando cantes... Teníamos MP, el buffet es pequeño, muy poca variedad, pero la calidad no es mala, estaba bueno. La ducha era malisima, o te quemabas o te congelabas...no era posible graduar, nose si sería solo en mi habitación o era general.
Estancia en el hotel: Enero 2019