El desayuno mediocre. Tratan mejor a los extranjeros que a los españoles. Inexplicable. El desayuno incluido era una tostada con café con leche. Yo pensaba que era en buffet. Al preguntar que por qué no se daba en el restaurante, me dieron como explicación que había pocos clientes que lo habían solicitado y que, como eran españoles, no lo hacían en régimen de buffet. Pero, el precio, sí, claro. El precio era de buffet. O sea, 14,5 euros. El desayuno real era de 2 o 3 euros. El segundo día de estancia pedí unos huevos revueltos y, al camarero, le tuve que explicar por qué los pedía. Con cierto incomodo por su parte, me los trajo. Había una pareja de ingleses desayunando a la misma hora que yo, un poco antes, y los atendía muy bien. Tenían fiambre en el desayuno jamón y queso fruta, yogur, pan tostado, zumo de naranja.... el café se lo trajo al final. A mi, al principio. Penosa la cosa. Al fin, me trajeron los huevos revueltos, el café estaba todavía caliente y el zumo no estaba mal. Tuve la sensación de pedir un desayuno que no era español. Vaya situación.
Estancia en el hotel: Abril 2011