Recepcionistas poco atentos, no dicen ni buenos días, la cama con ruedas y dos colchones pequeños en un somier grande en el cual había diferencia de altura, no hay mini bar y bastante ruido de la autovía, se oye todo de las habitaciones de al lado, algo bueno sería que el metro está a 200 metros y se aparca fácil. Yo no repetiría en ese hotel.
Estancia en el hotel: Diciembre 2013