El hotel está en una calle peatonal, al que puedes acceder dejando el coche en la puerta. Ellos mismos te aparcan el coche por un precio de unos 15 €. La ubicación del hotel está muy bien. Justo al lado de la calle Larios, una de las más transitadas de la ciudad, en pleno centro. La catedral también esta a la vuelta de la esquina. Y la playa se encuentra muy cerca a unos 1,2 km aproximadamente. La ubicación es inmejorable. Nos gustó mucho que al día siguiente, al dejar el hotel, pudimos dejar el coche para aprovechar el día de playa y luego recogerlo al final de la tarde por el mismo precio. El desayuno, para la categoría del hotel está muy bien. Los alimentos que ponen son de calidad, y hay variedad. La habitación que nos dieron era bastante amplia. Por poner alguna pega, es que no esta bien insonorizado, y se oyen todos los ruidos de las habitaciones de al lado, incluidas conversaciones... Por lo demás genial!. Volvería de nuevo.
Estancia en el hotel: Junio 2013