Opinión nefasta. Llegamos el primer día y la habitación era cutre no, lo siguiente. Tenía un fuerte olor a rancio, que era insoportable, todo parecido con la foto que aparece en la web es pura ilusión óptica, mi mujer había llamado al hotel antes de reservar porque viajamos con un niño que no puede estar en habitaciones con moqueta, de fumadores, con fuertes olores y necesita secador, la dijeron que no había problema que cumplía todos los requisitos. Pero la realidad era diametralmente opuesta. Después de mucho pelear el primer dia no conseguimos más que nos dejasen un secador bajo fianza de 10 euros. Menos mal que llegábamos tarde y con el niño dormido para estar lo menos posible en habitación. El primer día de Warner llegamos a la 1 de la mañana y no nos habían limpiado la habitación, sólo se habían llevado las toallas y no las repusieron. A la una y cansado tuve que ir hasta recepción que está lejos para q al menos me diesen toallas, jabón y papel higiénico. A la mañana siguiente fui a hablar con el gerente que muy amablemente para el último día nos ofreció cambiarnos de habitación y nos obsequió con el ultimo desayuno. PERO NO PODIAN HABERLO HECHO EL PRIMER DIA QUE NOS HAN ARRUINADO EL VIAJE. La segunda habitación aunque con deficiencias también era al menos mas acogedora y olía a limpio, la primera era de película de terror. Con este tipo de habitaciones no se puede ofrecer un servicio tres estrellas y es una pena que jueguen con la gente así porque la situación para Warner es buena y es tranquila, y así lo único q hacen es ganar un poco pero perder muchos clientes. NO LO RECOMENDARIA.
Estancia en el hotel: Julio 2019