Es un hotel muy familiar, limpio y acogedor. El personal es muy amable tanto el de recepción como el de servicios. El desayuno esta mas que correcto, habiendo variedad de fruta, cereales, embutido y dulces. Se puede degustar el famoso capuccino que te lo preparan al momento buenisimo.
Esta muy bien ubicado cerca de la estación de Termini que es de donde salen casi todos los autobudes de la ciudad y tambien las 2 linias de metro.
Segun su ubicación se puede ir andando a casi todos los lugares de interes de Roma. Es una ciudad que se puede hacer perfectamente andando.
En mi próximo viaje a Roma prometo volver al Hotel Camelia.
Estancia en el hotel: Septiembre 2015