La cama muy dura, el aire acondicionado no funcionaba y las ventanas estaban bloqueadas con llave. El wifi era muy lento y las bebidas del bar eran excesivamente caras. Difícil aparcar en las inmediaciones, por ello mismo, parking privado del hotel excesivamente caro, 10€ noche. Desayuno buffet repetitivo. Por todo lo demás, genial.
Estancia en el hotel: Mayo 2015