Las instalaciones no estan mal pero hay una suciedad increible en la zona de piscina. No hay ni una papelera, tal vez destrozadas por los turistas ingleses. No hay servicio de vigilancia ninguno, por la noche hubieron ruidos de clientes trasnochadores hasta las 7 de la mañana, nadie del hotel fue a pedirles silencio. La ocupacion era en un 90 % de turistas ingleses de menos de 25 años. Desprecio total hacia los demas, hacia la limpieza y mantenimiento de zonas comunes, musica a tope en la piscina y en habitaciones. El personal del hotel pasa de todo. No vuelvo por alli ni gratis.
Estancia en el hotel: Agosto 2008