La habitación que nos adjudicaron estaba enfrente de los ascensores por lo que pedimos al recepcionista que si podia nos diera otra. Asi lo hizo y como no era de fumador poque ya no habia, él mismo nos subió un cenicero al momento. Amabilísimo y corectísimo. La habitación fenomenal, como todo lo demás. Este hotel es un hallazgo, y el precio con Quierohotel, sin competencia. GRACIAS.
Estancia en el hotel: Septiembre 2009