Nos alojamos en el edificio RIGLOS que estaba un pelín alejado pero cerca de la estación de esquí en coche a 3 minutos y frente a la parada de autobús de la estación. Muy calentitos y bien equipados. Tienes que dejar la cocina americana en perfecto estado ya que te cobran 100 euros de mudanza.
Estancia en el hotel: Febrero 2011