Las habitaciones en general son antiguas pero están limpias, parece que están sucias del paso del tiempo en los suelos y muebles. No se encuentra en el centro sino a unos 5 minutos en coche. Lo mejor el restaurante en la planta octava, tiene vistas. Lo peor es que nos tocó un grupo en el hotel y las mesas buenas estaban ocupadas siempre.
Estancia en el hotel: Febrero 2015