En general la estancia ha sido muy buena. El hotel es reciente, moderno y muy limpio. La habitación muy bien, la cama enorme y comodísima y el cuarto de baño impecable con ducha por un lado y bañera por otro. El hotel tiene piscina al aire libre y aunque no ha hecho demasiado bueno, en cuanto salía un rayito de sol íbamos a la piscina a darnos unos baños. Hemos estado como en casa.. o mejor!. Sólo tengo un pero para este hotel y es para el servicio del restaurante Oro Negro. Estuvimos alojados una semana en régimen de Media Pensión y la carta era bastante bastante escasa... al tercer día teníamos que repetir por la escasa variedad de platos. Es preferible que suban los precios e incluyan más platos porque se hace pesado. El primer día es el que mejor cenamos, había bastante diferencia en la calidad de la comida de unos días a otros. Además el servicio era muy muy lento. El desayuno estaba bastante bien.
Estancia en el hotel: Septiembre 2014