La habitación y el baño estaban muy bien, y sobre todo tenía para mí algo muy importante: PERSIANAS. Hay hoteles de categoría incluso superior en los que el plastico que quita la luz nunca llega al final, con lo cual de madrugada es, al menos para mí, una pesadilla. No desayuné en el hotel y la cafetería por la tarde noche estaba cerrada.
Estancia en el hotel: Febrero 2012